El actor cubano Jorge Félix falleció el lunes 28 en el Jackson Memorial Hospital de Miami. Tenía 82 años.

Jorge Félix no sólo desplegó su talento ante las cámaras de televisión, medio en el que se impuso como galán en los inicios de la televisión cubana en la década de 1950. En su extensa carrera, también se desempeñó como director, productor de telenovelas y alto ejecutivo de Venevision International Productions.

El actor llevaba dos meses ingresado en el hospital tras sufrir un derrame cerebral.

“Murió tranquilo y rodeado de sus seres queridos”, expresó el director de cine Jorge Colón, su único hijo, de 46 años, quien lo consideraba su “héroe”.

“Mi padre se caracterizaba por su bondad. Siempre quería darle lo mejor a la gente. Fue un gran esposo. Aparte de considerarlo un gran padre, fue mi mentor”.

Félix nació el 5 de junio de 1931, en Santa Clara, Cuba. Tras darse a conocer como cantante en el grupo de Gastón Colón, su nombre verdadero, y Los Cinco Diablos, se abrió paso como declamador en el espacio radial Candilejas. Con el tiempo, y gracias a su estampa de galán, protagonizó numerosas telenovelas y el espacio humorístico Casos y cosas de casa.

En la película Con el deseo en los dedos (1958) compartió cartel con Minín Bujones, bajo la órdenes de Mario Barral.

“Lo recuerdo como un buen actor y un gran compañero”, expresó el productor cubano Arquímides Rivero, vicepresidente de Venevision Productions, quien evocó los comienzos artísticos de Félix en De fiesta con los galanes, aquel espacio juvenil de la televisión cubana donde alternó con Rolandito Barral, Albertico Insua y otros figuras de moda.

Félix llegó a Venezuela en 1961 acompañado por su esposa María del Carmen Inclán, su compañera de más de 50 años y madre de Jorge, nacido en 1967.

En su país de adopción, el actor revivió sus triunfos en Casos y cosas de casa, junto a la actriz América Alonso, y popularizó el personaje del aventurero Juan Sin Miedo en una serie de Radio Continente.

“Como yo pertenecía a Radio Rumbo, la emisora de la competencia, éramos ‘cordialmente rivales’. Pero fuera del trabajo siempre mantuvimos una amistad que se extendió hasta Miami, donde a cada rato nos íbamos a tomar café”, agregó Rivero.

Entre otras telenovelas, Félix dejó su huella en Crucificada, La cruz de la montaña, Tuya para siempre y De la misma sangre, en las que hizo pareja indistintamente con Carmen Julia Alvarez, Susana Duín, Loly Sánchez y Lupita Ferrer.

Al retirarse de la actuación, Félix se destacó como gerente de producción de Venevisión. Y cuando la empresa se trasladó desde Caracas a Miami ocupó el cargo de asesor dramático de Venevision International Productions, donde intervino en telenovelas y espacios de variedades. Su labor como director de producción se extendió a España, Perú, Panamá, República Dominicana y Colombia.

“Su ‘ejecutivo’ nunca se le subió a la cabeza. Siempre fue el mismo hombre caballeroso y gentil”, afirmó conmovida la actriz cubana Griselda Noguera, que recordó con nostalgia aquellos tiempos de “la gran familia de la televisión cubana” en que Félix compartía protagónicos con la actriz Hada Béjar en la CMQ. “Jorge era simpático, natural y muy buen mozo”.

Tras perder a su esposa, hace casi 10 años, Félix se refugió en la pintura, su hobby favorito.

“A él siempre le gustó pintar. Pero al morir mi madre la pintura se convirtió en una obsesión”, comentó Colón. “Era un gran admirador de la obra de Romero Britto”.

Al actor también le sobreviven sus nietos Jorge y Gabriel, de 24 y 19 años.

Al cierre de esta edición no se habían dado los detalles de los servicios funerales de Jorge Félix.