Por Mario Torres

Una de las más grandes diferencias entre un régimen democrático y otro totalitario, aparte de la gran y excesiva libertad de expresión en el primero y la ausencia de ésta en el último, es la falta de control de las actividades de cada ciudadano en sistemas democráticos y por el contrario, la exagerada vigilancia de cada acción y más mínimo movimiento que cada cual realiza en las dictaduras totalitarias. De ahí que las primeras, en aras de mantener y cumplir sus preceptos de libertad, derechos civiles y democracia pero quizás a veces cayendo en libertinaje como exceso opuesto al totalitarismo, sean mucho más vulnerables que las últimas a delitos, atentados, terrorismo, penetración y espionaje. La falta está en los excesos por ambas partes; siendo los de las dictaduras más abusivos, violadores e injustos pero los de las democracias más peligrosos para su estabilidad.

Las democracias están seguras que el producto que venden tiene aceptación y por ende no hay necesidad de obligar o reprimir a nadie a que haga o diga algo o a que no lo haga o diga ya que no hay temor de que nada se les vaya a ir de las manos o que su sistema se vuelque ya que todos tienen lo que quieren puesto que el término libertad va a ser equivalente a esa misma democracia. Por el contrario, una tiranía, que usualmente niega que lo es, sabe que no es bienvenida, que es impuesta y no aceptada y de ahí sus restricciones ya que existe miedo de una rebelión de su pueblo que generalmente va a estar descontento y va a expresarse con doble moral e hipocresía. Aqui está la clave de la falta de razón de un tirano que clame que su pueblo está conforme, porque siempre lo va a estar a la fuerza.

En un país como Cuba, existe una unilateralidad de criterios sin derecho a riposta donde siempre priman los voceros del gobierno y nunca se oyen voces opuestas y cuando esto ocurre, esa voz se oye solo una vez puesto que el férreo control y la despiadada represión la sacarán del medio debido a ese mismo miedo de sus gobernantes a perder su poder absoluto por un despertar de sus masas populares, por eso las voces que se escuchan de allá por el internet u otros medios de comunicación, ninguna podrá hablar mal del sistema y hasta serán pagadas por el mismo para propaganda a su favor. Nunca un particular, privado o de a pie osará ni soñará con escribir nada opuesto al régimen en un e-mail por ejemplo. Por el contrario, viven con temor de que si alguien, familiar o amigo, les escribe desde aqui les vaya a mandar algo que los perjudique y para justificar esa relación "prohibida", muchas veces para "limpiarse' escriben mensajes favorables al régimen solo por protección o evaden temas escabrosos por estos ser "veneno' para ellos en la tembladera en que viven.

Sin embargo en Miami, por ejemplo, se oye, se dice, se opina y se hace de todo, entra y sale cualquiera y hay libertad de reunión , de expresión y de opiniones de todo tipo siempre en ese casi religioso respeto de libertad y democracia pero hasta un punto tan alarmante que la ciudad se convierte en el "Potrero de Don Pío" donde a veces puede uno sentirse tan presionado y vigilado como si estuviera en la misma Cuba ya que esto lo conoce Castro y por esas razones tiene minada la ciudad con agentes pagados a su servicio. Solo en los últimos 5 años, se han capturado y procesado 21 espías cubanos tanto en el Pentágono como fue el caso de Ana Belén Montes, en una universidad como ha ocurrido con el matrimonio Alvarez en la FIU y en cualquier tipo de operación de penetración como fue el caso de la red Avispa. Y estos son solos casos conocidos y detectados pero en las innumerables migraciones provenidas de la isla, quién puede asegurar que por ciento de inflitrados hay y cual de reales inmigrantes o refugiados. Este fenómeno ha tomado tanta fuerza que hasta reuniones procomunistas se permiten celebrar en lugares públicos como ocurrió hace poco de nuevo en la FIUrelacionado con el Canal Sur. No se si el menosprecio que no hubo con la URSS haga que los americanos se descuiden tanto en esta guerra no tan fría. Ya esto es demasiado en que el pais más poderoso del mundo sea burlado por estos mequetrefes.

De ahí parte la incertidumbre que hasta aqui estamos rodeados por un enemigo invisible y muchos no están seguros ni hasta en el mismo exilio porque no se sabe quién es quién y más con la indiferencia e indolencia de las administraciones norteamericanas que subvaloran el peligro potencial de ser tan benévolos, pasivos y "respetuosos de la libertad y la democracia" dejando que el enemigo ande como Pedro por su casa. Los agentes no son solo los encubiertos sino los que en medios de comunicación masivos como la TV, la radio y el internet se dediquen "a salirle al paso" a los que describen sus heridas y torturas del régimen, desmintiéndoles y haciendo su propaganda hasta dentro de este mismo "Berlín Occidental".

En el mismo internet, hay agentes apostados desde la isla y aqui mismo en Miami, que no se creen ni lo que dicen ya que estos últimos, increiblemente luego de vivir aqui y disfrutar de las ventajas del sistema, critican al gobierno, dicen que son justicieros y neutrales o le dan vivas a Fidel Castro diciendo que son antiamericanistas y que Bush es cuantas cosas malas hay, pero comiendo carne, bañandose con ducha, con luz eléctrica, cable y un Toyota del 2004. Que mayor descaro puede haber que morder la mano del que te da la comida o renegar del que te mantiene. Estas personas siempre tienen el camino libre para irse a mejor vida pero inexplicablemente no lo hacen y además no se dan cuenta de que si estuvieran en Cuba no pudieran hablar mal del ogro de la isla porque no durarían ni un día en el aire. ¡Que gran benevolencia y a la vez triste desatención tiene este gobierno que después que recoge a estos parásitos les permite que le hagan la guerra desde su mismo suelo! Ellos saben bien que están en territorio libre y lo pueden hacer pero se les debería pagar con la misma moneda de su amo ya que veces un poquito de dictadura no viene mal para disciplinar libertinos aprovechados que no pueden negar que son agentes pagados por Castro ya que nadie más puede querer tapar el sol con un dedo de la forma que esta pandilla sincronizada y puesta de acuerdo lo intenta hacer.

Esta misma epidemia está diseminada en la radio donde hay estaciones que se dedican a defender la dictadura pero eso no es tan grave ya que no se debe olvidar que como éste es un pais libre, ellos también tienen ese derecho aunque nos duela, pero lo más insólito y que apoya la teoría de los "segurosos" apostados dondequiera, es que en un programa cualquiera contra Castro, digamos uno de Ninosca, siempre sale uno "de guardia del CDR" a meter la cuchareta y decir una barbaridad a favor del régimen. Estos que se manifiestan asi no se dan cuenta que están haciendo un uso de libertad de expresión que en Cuba no pudieran hacer, excepto "en una sola vía" y se quieren disfrazar de ciudadanos cívicos cuando todos saben que son otros agentes más de Castro.

Por otro lado, los que están "de guardia" en el internet desde la isla, por supuesto los pagados, los ambiciosos de marcar puntos, los hipócritas, comprometidos u obligados hacen descaradamente el papel de "sorprendidos e indignados" ante testimonios de una verdad la cual se la quieren desmentir hasta a los mismos cubanitos que la vivieron, que no son daneses o noruegos ajenos a esas realidad y fáciles de engañar. Estos tristes elementos tienen como función "equilibrar las opiniones en el internet" tratando de "mayorear" en los puntos de vistas favorables al sistema, saliéndole al paso a aquellos que condenan los abusos y revelan las verdades de sus propias experiencias.

Todo esto hay que mirarlo desde el punto de vista opuesto para entender mejor la ofensa: ¿Donde hubiera puesto Castro el grito si hubiese descubierto a un espía norteamericano en su Consejo de Estado o Buró Político, o quizás en la Universidad de La Habana? ¿Qué habria dicho si descubriese una red de espías minando su sistema? ¿Qué haría si en La Universidad de La Habana se celebrara un foro "pro Yankee"?
Aquí está el gran detalle de la abismal diferencia entre los dos sistemas, del provecho que toma Castro de las grietas que deja abierta la libertad y del exceso de confianza o indiferencia americanas.

Finalmente, se debe hacer un llamado al gobierno de los Estados Unidos para evitar la vergüenza que está ya comenzando a sufrirse, que sin darnos cuenta y cuando se abran los ojos, dentro de un tiempo tengamos en "cada cuadra un Comité" como en Cuba o que un día hasta el mismo Presidente sea colaborador de la seguridad del estado cubana por lo que se debe considerar que este territorio debe ser primero enemigo y hostil al tirano que "democrático" con su camarilla, para evitar esta real e insólita penetración Castro-comunista en todas las esferas de la vida de Miami y del pais en general.