Conocida
como La Reina del Bolero, Olga Guillot tiene más de 60
años de carrera artística, sobre todo porque empezó
muy joven, diría ella. Con una carrera de 20 discos de
Oro, 10 de Platino y uno de Diamante, la cantante cubana Olga
Guillot es reconocida por la crítica como "La Reina
del Bolero"
Olga
Guillot nació en Santiago de Cuba el 9 de octubre de 1922,
como parte de una familia de artistas. Posteriormente se mudó
a La Habana, cuando todavía era una niña, y formó
un dúo con su hermana Ana Luisa, que se llamó el
Dúo Hermanitas Guillot, el cual se presentó con
éxito en el programa de radio "La Corte Suprema del
Arte".
En
1938 inició sus preparación musical con maestros
como la soprano Hortensia Cohalla y al cantante Mariano Meléndez.
A principios de los 40, formó parte como segunda voz, del
cuarteto Siboney, dirigido por la compositora Isolina Carrillo.
El
músico cubano Facundo Rivero descubrió el talento
de Olga para ser solista y la ayudó a hacer su debut en
1945 en el conocido Zombi Club de La Habana.
Un
año después, la cantante grabó la versión
en español de la melodía "Stormy weather"
(Lluvia gris), composición con la que alcanzó un
éxito sin precedente.
Ese
mismo año, la Asociación de Críticos la seleccionó
como la cancionera más destacada de Cuba.
Otro
gran músico cubano, Miguelito Valdés, la llevó
a Nueva York, donde grabó un disco con el sello Decca.
En
1948, el famoso tenor René
Cabell la llevó a México, donde filmó su
primera película:"La venus de fuego", junto a
Meche Barba y grabó un disco con Anfion.
La
cantante también grabó algunas piezas acompañada
de la Orquesta de Gonzalo Curiel.
En
1952 y 1953 recorrió casi toda Latinoamérica y grabó
con el respaldo del pianista y compositor Juan Bruno Terraza.
En 1954 se hizo artista exclusiva de la compañía
discográfica Puchito.
Fue
en ese momento que grabó su famoso bolero "Miénteme",
del compositor mexicano Chamaco Domínguez.
En
1954, 1955 y 1956 ganó el premio de la Crítica Diaria
de Radio y Televisión a la Mejor Voz Femenina de Cuba.
En
1957 regresó a México, donde impuso en el primer
lugar el bolero "Tú me acostumbraste", de Frank
Domínguez. También grabó para la firma Musart,
acompañada por el maestro José Sabre Marroquín.
En
1958 trabajó en Europa por primera vez, con giras por Italia,
Francia, Alemania y España.
En
el mundialmente famoso Casino de Palm Beach, en Cannes, compartió
el escenario con la legendaria cantante francesa Edith Piaf.
Abandonó Cuba definitivamente en 1961 con su hija Olga
María rumbo a Caracas, Venezuela y fue acogida en casa
de otra cantante cubana, Renée Barrios.
El
compositor José Sabre Marroquín la invitó
a visitar México, y allí vivió por más
de tres décadas.
Ese
mismo de 1961, Francia le entregó el Disco de Brillante
por sus altas ventas, las mayores en Cuba de 1954 a 1960.
En
1963, la Academia de Artes John F. Kennedy de Hollywood, le otorgó
el premio Palmas de Oro como la Mejor Bolerista Latinoamericana.
Volvió
a Europa, viajó por América Latina, Israel, Japón,
Hong Kong y otros muchos países.
El
31 de octubre de 1964 realizó su primer e histórico
concierto en el Carnegie Hall, de Nueva York. Fue la primera artista
de habla hispana en presentarse en ese prestigioso teatro.
Cantó
al lado de Los Panchos y triunfó en España, llevó
la pieza "Adoro", de Armando Manzanero a la fama mundial.
También
grabó el tema "Me muero. me muero", de la mexicana
Lolita de la Colina, con la que se le consideró la "Pionera
de la Canción Erótica".
En
1988 celebró sus bodas de oro como intérprete estelar
de la canción melódica. Ha participado en 16 películas
y cuenta con 60 discos a lo largo de su carrera. Además,
varias calles
del mundo llevan su nombre.
En
pocos años, Guillot conquistó al público
con su manera apasionada de interpretar temas como "Tú
me acostumbraste", "Miénteme" y "La
gloria eres tú", entre otras, que fueron escuchadas
por primera vez en los escenarios más importantes de América
Latina, Europa y Asia.
La
cantante cubana es considerada "La Madre del Bolero"
y la figura más trascendental que dio la historia de la
canción del siglo pasado, también firmó contrato
de exclusividad con la empresa discográfica Warner Music
en 2000.
Hablar
de Olga Guillot es recordar a cantautores como Agustín
Lara, José Alfredo Jiménez, Lola Beltrán
y José Antonio Méndez.
Olga
llevó el bolero a niveles de clásico, por lo que
los especialistas no dudan en llamarle "La Reina" del
género.
A
pesar de su sorprendente carrera de más de seis décadas,
su música se encuentra restringida en su país natal,
los discos no se consiguen y la radio no toca su música
debido a que siempre ha sido una dura crítica del sistema
político cubano, en especial de la figura del comandante
Castro.
La máxima leyenda del bolero,
como Celia lo fue de la salsa, murió también sin
volver a la Cuba que dejó nada más triunfar la Revolución.
La
muerte de la cantante cubana Olga Guillot, considerada
la figura máxima del bolero por más de seis décadas,
deja un vacío en el ambiente musical iberoamericano dificíl
de llenar. Guillot falleció en el hospital Mount Sinai
de Miami Beach el lunes 12 de julio de 2010 a las 12:45 pm víctima
de un infarto cardíaco. Tenía 87 años.
Olga
Guillot traspasó todas las fronteras, especialmente las
españolas, donde fue una referencia para varias generaciones
que ya superan el medio siglo.
Fueron
múltiples sus actuaciones en directo, siempre recordadas,
y sus discos. Grabó más de 50, una cifra superada
y genial para ella por la música, pero nefasta por los
años de exilio. "No volveré a Cuba hasta que
sea libre y democrática", sentenciaba. Pero su sueño
era volver a cantar en Tropicana el prestigioso cabaré
de La Habana.
Olga
Guillot no perdía oportunidad pública para pronunciar
su sentimiento contra del Gobierno cubano y el deseo de libertad
para su tierra natal. Sus triunfos en el exterior no dejaron que
olvidara la lucha que mantiene el exilio de Cuba.
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