Por
Pedro Rafael Gutiérrez
Mientras en Cuba el dictador Fidel Castro pareciera disfrutar
del purgatorio antes de partir al mas allá, su hermano
Raúl cumple 100 días de haberlo sustituido. Raúl
no se esforzó ni sudó una gota de sudor para recibir
de su hermano la herencia de un país entero, como si fuera
un chunche cualquiera incluyendo a los cubanos.
Durante
muchos años me he cuestionado sobre el descontento político
de los cubanos. No creo en tal. Sobre todo cuando la sociedad
es incapaz de protestar por la tiranía de Castro, únicamente
difundida a cuatro gritos por cubanos en Miami. "No te hace
falta un "Home Depot" ni un "Wal-Mart" en
Cuba, cuando jamás en tu vida lo has visto, ni mucho menos
un celular, el que solo en los periódicos has visto..."
-me decía una cubana hace tiempo-.
Las
sociedades de Latinoamérica se han sacudido las dictaduras
saliendo a las calles sonando cazuelas y en muchos casos derramando
sangre de sus nacionales. Ubico en Guatemala, El Salvador, Nicaragua,
Chile, y decenas de países con dictaduras anti sarro, fueron
eliminadas, aunque la medicina como en el caso de Nicaragua resultara
peor que la enfermedad.
Hoy
Raúl Castro, viene a permitir a Cuba el ingreso de chunches
tecnológicos como los teléfonos móviles y
los procesadores -como dirían los españoles- cual
juguetes para niños malcriados. Esta apertura tecnológica
no es mas que un negocio millonario para ellos, al recibir de
los provedores jugosas comisiones por la venta de los celulares
y computadoras.
Hoy
Raúl Castro viene a abrir las puertas y crearles un espacio
a homosexuales y lesbianas a la cabeza de su hija, como una muestra
de "libertad" en la isla, boomerang amoral que se devolverá
en contra de la sociedad cubana causando mayores daños
a los valores de los cubanos. Basta un pequeño recorrido
por el Malecón de la isla, para ver la multicolor presencia
de estos personajes quienes venden su cuerpo por unos cuantos
dólares
Cuba
es la misma. Los presos políticos atiborran las cárceles
cubanas y las elecciones democráticas son un texto de política
en las universidades estatales. El engaño y la patraña
con la que estos Castros han manipulado sus intereses son un rico
manjar para los deseos interminables de la avaricia y del poder.
Raúl sigue siendo asesorado por sus eternos camaradas llamados
de "mano dura" o "anillos de hierro" como
el de los sandinistas encargados de elaborar una propaganda a
favor de los pobres , pero usando aires acondicionados en las
plazas públicas, usando chaquetas de cuero de Armany e
invirtiendo en condominios para ricos en las costas de Tola o
Montelimar.
Fidel
y Raúl son zorros de la misma camada, las dos caras de
la misma moneda, aquella moneda que nos vendieron los comunistas
representadas por el filo mortal de la hoz y los mortales golpes
a la libertad del martillo... |